Bar A Galería
La visita será esta vez a uno de los bares más emblemáticos de la comarca, A Galería, en Fisterra, un establecimiento de los que hacen parroquia pero con unos parroquianos que hablan muchas lenguas distintas.
No es de los que llevan toda la vida funcionando, pero lo parece. Abrió las puertas en 1998 Roberto Traba de un local en el casco viejo, en la calle Real, de esos que, en principio, no tendrían por qué tener futuro, apartado de los circuitos turísticos.
Pero ahí está, con sus fieles que no fallan a las cañas y las copas y a la animada charla de Roberto Traba. El único bar del mundo que, como él dice, es un bajo -por la calle Real- y un cuarto piso -mirado desde el puerto-. Desde sus ventanas se contemplan las fantásticas vistas del puerto con la ría y el atardecer como fondos perfectos.
Las paredes, llenas de fotos, dibujos y todo tipo de cachivaches, hablan de la relación estrecha del local con los miles de peregrinos que han pasado por allí a tomarse las cañas tras quemar sus ropas.