Concatedral de Santa María de la Redonda
Durante el siglo XX se acometen tres importantes obras, la primera la de consolidar las columnas del templo, la segunda instalación de calefacción y, la tercera, la construcción a comienzos de los 60 de la nueva casa parroquial que consta de anejos de la sacristía, sala capitular, vestuarios, plantas de reuniones – salones parroquiales para el desarrollo de las actividades parroquiales y tres pisos vivienda del párroco y coadjutores. También, durante la última década del siglo XX comienza la restauración del templo que todavía continúa en la actualidad.
No podemos, por supuesto cerrar este apartado sin tener en cuenta la Bula Pontificia del 9 de marzo de 1959, con cuyas letras la vieja colegiata se vio elevada a iglesia Concatedral, compartiendo la silla del obispo con las catedrales de Calahorra y de Santo Domingo de la Calzada.