Oficina de Turismo de Logroño
El Camino de Santiago, la oferta comercial, la gastronomía y los entornos naturales integrados en la misma ciudad o a muy poca distancia de la misma, como los distintos parques de la ciudad, entre los que destaca el del Ebro; o el de La Grajera, a tan sólo cinco minutos del centro, se convierten en cita obligada para el visitante y en importante motivo para la relajación para el vecino logroñés. Lo dicho, un paseo siempre mejora la calidad de vida de las personas. Logroño se presta para ello.