El Desván del Infante
Villalcázar de Sirga es de esas poblaciones privilegiadas que asienta sus reales sobre el mismísimo Camino de Santiago y a medio camino entre otros dos lugares sobresalientes: Frómista y Carrión de de los Condes, por lo que sus calles son visitadas por miles de peregrinos y otros muchos turistas, todos los años.