Hostal restaurante Teodora
Si bien sus orígenes se remontan a la época romana, es durante la época medieval cuando Arzúa adquiere una singular importancia como lugar de reposo y descanso de los innumerables peregrinos que por el Camino Francés iban en dirección a Santiago, encontrando aquí el lugar adecuado para reponer fuerzas y afrontar así el último trayecto hasta Compostela.
Esto se deduce del Códice Calixtino, cuando entre los lugares que señala como importantes de la ruta, cita «Vilanova» equidistante entre Castañeda y Ferreiros, identificando así geográficamente a la actual Arzúa como la decimotercera y última etapa del Camino Francés hacia Compostela.